Con Zerca y Lejos tenemos una larga y exitosa trayectoria de proyectos en Camerún, la mayoría de ellos relacionados con la reparación o rehabilitación de pozos de agua, que son una de las maneras más comunes de acceso al agua potable y segura en poblados de esa zona como Adjap Millton, Ando'o, Akonetye, Mekotto, Assok, Nkolemboula o Belle-Ville.
Para este post hemos charlado con Loreto Rebollo y Camila Espinel, responsables de Proyectos y Comunicación de Zerca y Lejos, respectivamente, con la idea de que podáis conocer mejor la labor de esta ONG para el Desarrollo que trabaja codo con codo con poblaciones indígenas de la selva de Camerún y otras zonas del mundo, y que comparten con AUARA la idea de que el agua y el saneamiento son uno de los pilares del desarrollo.
¿De dónde surge Zerca y Lejos?, ¿Cuál es su misión?
No elegimos donde nacemos, pero podemos elegir dónde vivir y a qué dedicar nuestra vida. Zerca y Lejos nace del deseo de vivir para las personas más vulnerables y abandonadas de nuestro mundo, tanto Cerca, en nuestro entorno -las personas migrantes, personas sin hogar- como Lejos, en los lugares más empobrecidos de la Tierra. África es el continente cuyos países ocupan los lugares más bajos en las escalas de desarrollo y por tanto donde viven las personas más empobrecidas del planeta. Zerca y Lejos nace de ese deseo de acercarnos a los que nadie se acerca y amar a los que nadie ama. Acortando las distancias que nos separan y haciéndonos familia, amigos y amigas, compañeros y compañeras de lucha con los hombres y las mujeres, los niños y las niñas que no cuentan en nuestra sociedad.
¿Qué tipo de proyectos realizan?
Impulsamos proyectos que buscan atajar las inequidades sociales a las que se ven sometidos los colectivos a los que acompañamos, y trabajamos en favor de su autonomía y acceso a los derechos humanos en contextos muy específicos de Perú, como es la región de Loreto en la Amazonía peruana, y de Camerún, en las regiones rurales del sur y en el extremo norte del país.
Nuestros proyectos abarcan la promoción y el acceso al derecho a la educación y salud, la incorporación de infraestructuras que hagan efectivos el acceso a la educación, a la atención sanitaria y al agua potable, y el trabajo por la autonomía y los derechos humanos de los pueblos, donde impulsamos junto a las personas titulares de derecho, procesos de soberanía alimentaria y la lucha por el reconocimiento de los derecho de dichas comunidades, como es pueblo Baka en el sur de Camerún.
Todos nuestros proyectos tienen como común denominador su aplicación desde un enfoque de género y de derechos humanos, por lo que nos regimos por los estándares dictados por la Organización de las Naciones Unidas en las distintas convenciones y acuerdos en torno a los derechos humanos.
¿Cómo ha afectado la pandemia a los proyectos en marcha?, ¿y a la situación de los desfavorecidos en las zonas donde trabajan?
La situación más complicada la hemos vivido en la región de Loreto en Perú, que fue una de las más golpeadas del país, teniendo también en cuenta que Perú ha sido uno de los países más afectados por la pandemia. Pudimos mantener nuestro proyecto de educación adaptándolo a un seguimiento con clases particulares. Los demás tuvimos que paralizarlos y nos volcamos en la atención sanitaria y el apoyo a otras organizaciones e instituciones para el reparto de alimentos y trabajo logístico. La situación del sistema de salud antes de la pandemia del COVID-19 ya era muy preocupante pues había una gran presión por la incidencia del dengue y la malaria. Con la llegada de esta enfermedad, el único hospital de la región estaba desbordado, el personal muy mermado y la mayor crisis que sufrió el país fue la falta de oxígeno. La población de la región de Loreto sufrió mucho abandono por parte de las autoridades, su situación en el interior del Amazonas, la falta de infraestructuras y el río como única vía de comunicación imposibilitaba que la población pudiera recibir las ayudas.
En el caso de Camerún, aunque la incidencia ha sido menor, nos pusimos a disposición de varias instituciones para el apoyo en la producción y reparto de mascarillas, gel hidroalcholico y respiradores, con la difusión de campañas de sensibilización para el autocuidado y autoprotección sanitario de la población, y con el seguimiento de la pandemia en las poblaciones rurales. En el caso de nuestros proyectos tuvimos que cancelar todas nuestras campañas de salud y adaptar nuestros centros educativos a las medidas adoptadas por el Gobierno.
¿Cuáles son los principales objetivos de la organización para 2021?
Para este 2021 nuestros principales objetivos son poder retomar los proyectos que hemos tenido que paralizar por la incidencia de la pandemia, el desarrollo del proyecto de paz y reconciliación que iniciamos a finales del año pasado en el Extremo Norte de Camerún, y dar respuesta a todas la necesidades que se sigan presentando por el COVID-19.
¿Cuáles son los principales problemas en Camerún?
Es muy complicado identificar los principales problemas del país pues cada región tiene unas características determinadas y muy específicas que determinan el impacto de las problemáticas del país. En ese sentido, no podemos hablar de problemas desde un punto de vista general, si no que, debemos hacer una lectura muy contextualizada y centrada para dar cuenta de ellos.
Y en cuanto al agua, ¿Cuál es la problemática?
En relación al acceso al agua potable, en el departamento de Dja et Lobo, en la Región Sur de Camerún, los puntos de agua potable no son asequibles por la dispersión de la población en el territorio, situación que también imposibilita la construcción de una red de saneamiento. Esto tiene como consecuencias que la población tenga que recorrer muchos kilómetros para llegar a los pozos o que recurra a aguas estancadas y, lo más importante, los efectos nocivos que esto tiene para su salud, aparte de ser una vulneración de sus derechos.
¿De dónde surge la colaboración con AUARA?
Surge de la necesidad de tejer alianza con otros actores que tuvieran la misma sensibilidad y preocupación por una problemática, como es el acceso al agua potable, y que, injustamente, afecta a poblaciones vulnerables y donde los responsables estatales no dan respuestas efectivas.
¿De qué proyecto, de los que hemos realizado juntos, estáis más orgullosos?
De lo que nos sentimos más orgullosas es de haber conformado un equipo sólido de personas que se han comprometido en hacer real un derecho fundamental como es el acceso al agua potable, lo cual repercute en calidad y el disfrute de la vida de los colectivos a los que acompañamos.
¿Cómo animaríais a la sociedad y a potenciales voluntarios a colaborar con causas como la de Zerca y Lejos?
Consideramos que en el momento actual, donde los acontecimientos que estamos viviendo nos presentan la grave situación de crisis en la que se encuentran nuestros sistemas de convivencia, (la relación con el medio ambiente, las crisis de poder y el cuestionamiento de las divisiones simbólicas Norte - Sur), se convierte en un imperativo promover procesos de transformación a partir de la toma de conciencia de estas problemáticas.
Para ellos impulsamos y construimos distintos espacios en España, en la Amazonía peruana y Camerún, que desde distintos contextos y con miradas situadas, puedan incluir y animar a sumar distintas sensibilidades, distintas voces, distintas visiones, y que todas ellas, desde su diversidad puedan reconducir e impulsar cambios hacia una justicia social.