La sostenibilidad es un término que ahora más que nunca está en boca de todos, muchas veces bien entendida y a veces, desgraciadamente, como una mera herramienta de marketing. Podríamos estudiar detalladamente la definición de sostenibilidad (Satisfacción de «las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades». Informe Brundtland de la ONU "Our Common Future". 1987, Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo.) y analizar sobre la tasa de renovación de nuestros recursos pero no, en lo que prefiero que nos centremos es en las palabras “generaciones futuras”, si, porque llegará el día en que nuestros hijos nos preguntarán si no quisimos o no supimos darnos cuenta de que les estábamos dejando como legado un Planeta lleno de residuos y prácticamente vacío de recursos.
Si quieres que esto no sea así y prefieres ganarte el día de mañana una mirada de orgullo y no una de reproche, te invito a que empieces desde hoy a trabajar en una sostenibilidad bien entendida, desde tu propio hogar, pues no solo con las acciones a gran escala se consiguen resultados, con nuestras elecciones en el consumo estamos contribuyendo día a día a las tendencias del mercado.
¿Nunca has pensado que las tiendas son mares de plástico de objetos con una vida muy corta y muchas veces innecesaria y que agotamos los recursos en cosas superfluas? ¿Qué ocurrirá cuando los necesitemos para cosas vitales y sean un bien escaso? Siempre pienso que sería curioso tener un contador personal de consumo de recursos versus su utilidad, así quizás nos daríamos cuenta de que podríamos ser más eficientes no solo en el trabajo, en la gestión de nuestro tiempo etc… sino también en nuestro consumo, en el uso que hacemos de los recursos de nuestro planeta.
Actualmente hay nuevos movimientos como el minimalismo o el #zerowaste que indudablemente ayudarán a un consumo más responsable, pero os propongo comenzar por lo que he denominado camino slowgreen, es decir,
vayamos poco a poco hacia una vida más sostenible, sin radicalismos, sin críticas, empezando en nuestros hogares, mirando sólo hacia delante y aprendiendo poco a poco unos de otros ¿qué os parece?Podemos comenzar nuestra andadura slowgreen con algunos tips para un verano más sostenible:
Si comenzamos lenta pero constantemente el camino hacia la sostenibilidad, hacia una economía circular en la que prime el ecodiseño y la reutilización, quizás podamos decir a nuestros hijos que la época de “usar y tirar” solo fue un pequeño bache en el desarrollo de nuestra economía, una especie de “ensayo y error” del que afortunadamente, aunque tardamos, nos dimos cuenta de que no funcionaba y que no era eso lo que les queríamos dejar como legado…
Gracias Laura por participar en nuestro blog.
Ambientóloga de profesión desde hace mas de 10 años, ha dedicado su vida profesional primero a la consultoría ambiental y posteriormente ha desempeñado puestos de responsable de medio ambiente en empresas. Entre sus próximos proyectos esta crear una comunidad de LOHAS ( Lifestyles of Health and Sustainability) para difundir este camino hacia la sostenibilidad del que os habla post, en esta comunidad unirá mis dos pasiones: la vida saludable y sostenible ¿te unes? Instagram: @lohas_imperfectos, ¡Os espera!