Principales preocupaciones humanitarias en 2016 (y que podemos aprender de ellas)

junio 22, 2016

Principales preocupaciones humanitarias en 2016 (y que podemos aprender de ellas)

Imagina que preguntases en una calle cualquiera de Europa cuáles son las cosas que más le preocupan a cada uno. Las respuestas, por supuesto, serían variadas. Unos te dirían que les cuesta llegar a fin de mes. Otros te dirían que tienen problemas de pareja. Y quizá algunos tendrán pegas porque el trabajo que tienen no les gusta demasiado.

Imagina, ahora, volar con la mente y escuchar un tipo de respuestas muy distinta a las que acabo de contaros. Imaginad que las personas que te contestan, con los mismos derechos, con sus virtudes y también defectos. Que sufren. Que se alegran. Que lloran y ríen. Imagina que según sus contestaciones te hacen preguntarte si de verdad son tan iguales. Si de verdad viven en el mismo mundo.

Quizás alguno te hablaría de la crisis de Siria. Un país dominado por una guerra civil que se alarga ya más de 5 años. Esa crisis, que ha provocado una llegada importante de refugiados a Europa nos ha llevado a olvidar, en gran medida, que la mayoría de los afectados se encuentran todavía en Siria y alrededores.

A lo mejor te sacan también el tema de El Niño y su cada vez más claro impacto climático que está siendo devastador en ciertas zonas de África. Siendo el peor que se recuerda desde 1978, está dejando a su paso una sequía en Etiopía de tales magnitudes que provoca que 15 millones de personas estén en una situación alimentaria crítica. Una lucha plena por la supervivencia.

Incluso, otros, más enterados, te dirán que en Afganistán el conflicto está lejos de terminar y que los civiles siguen pagando un precio muy alto con datos estremecedores: 2015 fue uno de los años más mortales desde 2001. Un deterioro de la seguridad que obliga a las personas a abandonar sus hogares y buscar refugio en los países vecinos o intente esas rutas peligrosas a Europa. Las mismas que ahora parecemos todos conocer al dedillo.

Con todo ello no quiero decir que nuestros problemas no importen. Lo hacen y mucho. Lo que propongo es que cada uno haga por sí mismo un ejercicio:

"Put your shoes in other people shoes"

Que también se puede resumir en una palabra: empatía. Es posible que, de esta manera, miremos nuestros problemas desde otro prisma. Un prisma con el que darnos damos cuenta de que hay gente que nunca abandona. Que siempre tiene esperanza. Y en su esfuerzo, en su camino, está la victoria. Utilizar este conocimiento de punto de apoyo para darnos cuenta de que podemos superar cualquier obstáculo es ya cosa de cada uno. Pregúntate, ¿qué tipo de persona quieres ser?