Queridos amigos de AUARA,
Dar las gracias ya me parece insuficiente. Podría llenar cientos de líneas dando las gracias a nuestros clientes, a nuestros inversores y a nuestros proveedores.
Podría estar horas dando las gracias al equipo increíble que tenemos, a los voluntarios que nos ayudan y nos dan lo mejor que tienen.
Podría agradecer infinitamente a nuestros socios de proyectos, a todos nuestros beneficiarios por ser nuestra inspiración y el motivo por el que existe AUARA. Podría pasarme el año dando gracias a Dios y a la vida.
Pero creo que la mejor forma de agradecerlo todo es seguir trabajando como lo hemos hecho hasta ahora y aún más. Que nuestra forma de dar las gracias este año sean, además de las palabras, nuestras acciones.
Seamos mejores compañeros, mejores clientes, mejores proveedores, mejores embajadores, mejores personas. Seamos mejores en la oficina, en nuestras casa y hasta soñando. Si esta empresa no sirve para que seamos mejores personas, de poco habrá servido.
Este año me gustaría hablaros de amor. El amor es lo que nos ha movido a llegar hasta aquí, a sobrevivir al arranque de un proyecto tan absolutamente idealista y difícil. Y no solo a sobrevivir, sino a estar más fuertes que nunca y con más ganas de liarla que nunca.
No somos los mejores en lo que hacemos. Ahí fuera hay gente seguramente más lista que nosotros trabajando en empresas más grandes y más fuertes.
Pero no tengo duda de que somos los que más amor ponemos cada día. Esa es nuestra gran ventaja competitiva. Un montón de gente imperfecta, todos con nuestras miserias, nuestros errores y nuestros malos días, somos capaces de sacar lo mejor de nosotros mismos, de aprender los unos de los otros y de ponerle el mayor amor a lo que hacemos. Que no se nos olvide nunca. En eso debemos ser los mejores siempre.
Y en este año, como siempre pero más que nunca, el amor es la clave. Pongámosle amor a todo lo que hagamos, desde las cosas grandes hasta los pequeños detalles. Cada pensamiento, cada conversación. Afrontemos los problemas y las dificultades con amor. Aceptemos los triunfos con amor.
No estamos en esta vida para trabajar más ni AUARA existe para facturar más. Estamos todos para multiplicar el amor. Y si nos dejamos la piel trabajando es porque estamos construyendo algo grande. Especialmente cuando las cosas vayan mal. En esos momentos es cuando no debemos olvidar todo esto.
Y no tengo duda de que desde el amor vamos a alcanzar y superar nuestros objetivos y conseguir que 2020 sea un año espectacular en todos los sentidos. Sin perder nunca de vista el fundamento de todo.
Os doy las gracias porque trabajar con todos vosotros es una motivación constante para amar más y para ser mejor. ¡¡¡¡¡VAMOS!!!!!
Antonio Espinosa de los Monteros
CEO y Becario