La importancia de cuidar las cosas

mayo 03, 2017

La importancia de cuidar las cosas

Está roto ¿Cuántas veces hemos usado esa expresión? Prácticamente a diario. Desde que somos niños monopoliza nuestro vocabulario y se convierte en la excusa perfecta para desechar cualquier cosa que tiene un fallo.

La sociedad en la que vivimos ha cogido por costumbre escapar de las situaciones que generan malas vibraciones. Consideran el conflicto como algo a evitar. Las cosas son buenas cuando salen bien. Le ponemos la etiqueta de tóxica a los momentos difíciles. Lo ideal es un entorno limpio. Aséptico. El objetivo es claro: salir rápido y como sea.

Esta mentalidad, propia del mundo feliz que nos planteaba Huxley como hipótesis de futuro, se olvida de un concepto básico en la naturaleza: la importancia de fallar.

Fallar tiene una labor pedagógica fundamental. Es un testigo que te anima a reforzar tus debilidades. También ayuda a conocerte mejor a ti mismo y tus fortalezas, lo que te permitirá mostrarlas en los momentos que lo necesites. En definitiva, fallar te enseña a ser más atento. A ser más cuidadoso. Y también a ser más valiente porque mejora tu autoestima al saber que eres capaz de sobreponerte a las adversidades. De esta manera, al mejorar tú, mejoras tu entorno, haciendo mejor y más completa la vida de los que están a tu alrededor.

 

África está repleta de pozos de agua que corresponden a la categoría de la que hablábamos al principio. Están rotos. El continente donde mayor inversión en infraestructura de agua se ha realizado peca una y otra vez en una de las cuatro etapas en las que se soporta todo proyecto de ingeniería: iniciación, planificación, ejecución, seguimiento y control. Es decir, peca de no cumplir con ese cuidado, esencial en la vida.

La parte positiva es, como cuenta Xavier Aldekoa en su libro “Océano África”, que en África nada está roto, solo espera a ser reparado. La esperanza entre sus gentes domina un ambiente donde el reloj corre a distinta velocidad, sobre todo para los que pasamos nuestros días acelerando cuando intuimos el ámbar en los semáforos. Allí donde la victoria significa pasar un nuevo día, esta buena actitud lo significa todo. Tener esperanza y confiar en que todo puede mejorar. ¿Por qué no unirnos a ese trending africano?

Pozo Camerún

Para unirse a esta tendencia, Auara va a invertir en proyectos como el de Meyos, en la región sur de Camerún. Un proyecto que realizará en contraparte con Zerca y Lejos que rehabilitará un pozo en el colegio de la comarca. Este pozo deja de dar agua cuando en la estación seca baja el nivel freático. Deja de ser útil. Profundizarlo y realizar un plan de control del mismo permitirá que la población pigmea Baka que vive en la zona tenga un acceso continuo a agua potable, con el impacto que tendrá esto en la reducción de enfermedades ligadas a la falta de agua e higiene.

Un proyecto que cuidará de una infraestructura que ya existía en la zona, por lo que su impacto ambiental será mínimo y, en cambio, el impacto social será total. Gracias por hacer posible esto. Gracias por hacer posible un nuevo proyecto Auara.