Conoce a Alberto García, nuestro videógrafo en el viaje a India

diciembre 21, 2022

Conoce a Alberto García, nuestro videógrafo en el viaje a India

Debes centrarte en mirar la realidad de la mejor manera posible y buscar las cosas buenas”

Hoy en Planeta AUARA entrevistamos a Alberto García, el videógrafo que ha acompañado al equipo en su reciente visita a India para conocer la evolución de los proyectos en marcha en este país, en el estado de Tamil Nadu. 

 - ¿Cómo describirías la experiencia?

Ha sido una experiencia inolvidable. Poder acercarte a estas situaciones para abrir los ojos y ver de cerca la realidad que allí viven, las diferencias entre culturas…

- Aunque desde AUARA os ponen en pre aviso de lo que vais a encontraros en estos viajes, ¿es comparable con lo que después sientes una vez llegas allí?

La verdad es que no. Por mucho que te imagines las situaciones, es necesario vivir esos momentos y “darte el tortazo” de realidad para, de verdad, darte cuenta de cómo son las desigualdades que existen.

- En AUARA siempre intentan reflejar la realidad, pero desde un punto de vista optimista. En ningún caso se pretende inducir a la pena, y para buscar ese enfoque, realmente es importante mirar desde otra perspectiva. ¿Cómo ha sido ese trabajo para ti, como persona responsable de reflejar la realidad?

Soy una persona a la que le gusta reflejar la realidad como es, sin adornos. Para lo bueno y para lo malo. En este caso es complicado, porque hay muchos momentos muy duros y debes centrarte en mirar la realidad de la mejor manera posible y buscar las cosas buenas que, por supuesto, siempre las hay.

- Como fotógrafo y videógrafo, ¿cuál ha sido la anécdota más positiva que has vivido durante este viaje? ¿Y la más negativa? 

Como anécdota positiva, la alegría de los niños jugando, su forma de mirarnos y de acercarse a mi cuando veían la cámara para que les retratase.

Y la negativa… visitar una zona de slums y ver la pobreza tan de cerca y tan real en algunos momentos, con niños y con familias. Eso fue muy duro. También me impactó ver las condiciones en las que viven en un centro de niños de la calle que visitamos.

- ¿En algún momento o situación te has encontrado alguna dificultad a la hora de grabar? Ya sea por el terreno, el clima, las personas…

Os diría que todos los días. Estás trabajando en un terreno donde no estás cómodo. Hace mucho calor y humedad, además, estás inmerso en otra cultura que se comporta de otra forma muy diferente, lo que hace que sea complicado grabar. Por ejemplo, los niños te miran asombrados porque no tienen la costumbre de ver cámaras. 

- ¿Por qué crees que es necesario reflejar otras realidades como esta?

Es necesario abrir un poco los ojos a otras personas, que descubran que el mundo es mucho más de lo que ven a diario, o en redes sociales donde nos muestran una pequeña parte de la realidad.

- ¿Qué te aporta a nivel profesional una experiencia de este tipo? 

Es un plus de aprendizaje y vivencias en el terreno profesional. Para mi es como subir un peldaño más en la escalera, ya que me he enfrentado a situaciones complicadas emocionalmente que no suelen ser lo normal en mi día a día. Para resumirlo un poco: he podido salir de la zona de confort.

- ¿Qué te ha aportado la experiencia a nivel personal?

Sobre todo me quedo con  las personas que he conocido en el viaje, de las que he aprendido mucho y me han ayudado tanto. Tanto las personas que nos recibían allí como todo el equipo AUARA. Poder acompañarles en este proyecto ha sido una oportunidad que quiero agradecerles. Me llevo una experiencia imprescindible para ver la vida con otros ojos.

 

Los proyectos de AUARA en India se sitúan en el estado de Tamil Nadu, ubicado al sur del país. Su población no puede resolver sus necesidades básicas de agua potable debido a que los pozos se han secado y el agua dulce se ha agotado, por lo que la única solución es construir nuevos pozos e instalar bombas a motor que permitan extraer el agua, a  la vez que depósitos para almacenarla. Desde 2018, y con la colaboración en terreno de la Fundación Esperanza y Alegría, se han impulsado en la zona 27 proyectos, que han mejorado la calidad de vida de 23.000 personas, generando 45 millones de litros de agua.