La Asociación Española de Fundraising (AEFR) presentó a finales de 2018 el estudio ‘La colaboración de los españoles con las entidades no lucrativas’, desarrollado en colaboración con la consultora Kantar Millward Brown, en el que se destaca que el 55% de la población española (21.832.559 personas) ha colaborado económicamente en alguna ocasión con alguna entidad no lucrativa, y que el 36% (14.290.403 personas) afirma haberlo hecho durante el último año. Por el contrario, el 41% reconoce no haberlo hecho nunca, aunque el 96% de la población sabe lo que es una ONG y las funciones que cumplen.
La AEFR presentó también, junto a la Fundación de la Universidad Autónoma (FUAM), el estudio ‘El fundraising como herramienta de responsabilidad y compromiso social. Situación legal en la Unión Europea. Estado de la cuestión en España y propuestas de reforma’, según el cual la última reforma fiscal supuso un impulso a la donación por parte de las personas físicas en el ejercicio 2015-2016.
Este informe cifra en 85.000 millones de euros la colaboración de los europeos con las organizaciones no lucrativas durante 2017. Los españoles contribuimos con 3.700 millones de euros y ocupamos la séptima plaza, aunque lejos de las cifras de Reino Unido (25.300 millones), Alemania (23.800 millones), Italia (9.100 millones) o Francia (8.400 millones).
En cuanto al perfil del donante, el 52% de la población que colabora con las ONG en España son mujeres y el 48% hombres, y los colectivos que más preocupan son los niños y las personas mayores, pero no son necesariamente a los que más se apoya. Por orden de importancia, los colectivos con los que más se colabora son los enfermos (50%), los niños (47%), las víctimas de catástrofes, refugiados o personas de países en desarrollo (42%); las personas sin recursos de nuestro propio país (18%), el medio ambiente (13%) y las mujeres (7%).
Según el estudio, los sentimientos que más movilizan a las personas para la donación son la empatía (36%) y la ética (33%), muy por encima de la cercanía (11%), la autoestima (8%), la notoriedad (7%) o la prescripción (3%). En lo que se refiere a las barreras para no donar, encabezan la lista la falta de confianza en las ONG (44%) y los problemas económicos (34%), seguidos de la práctica de otro tipo de colaboración (9%), pensar que es responsabilidad de otros (6%), tener otras prioridades (5%) o considerar que no es necesario (1%).
La noticia más positiva que se desprende del informe es que los españoles se animan cada vez más a colaborar con las ONG para mejorar la sociedad. Ya sólo falta que los que todavía se resisten, o no son socios habituales de una entidad, elijan la causa o causas con la que empezar a colaborar y busquen la motivación que les lleve a hacerlo. Seguro que todos la podemos encontrar.