Este año se cumplen siete desde que en 2015, Naciones Unidas aprobara los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Cada uno de ellos representan un importante reto relacionado con el bienestar de las personas, la naturaleza y el planeta que proponía a gobiernos, empresas y sociedad, alcanzarlos antes de 2030, por el bien de todos. 193 países —también España— se comprometieron con ellos y hoy, en la mitad del recorrido, podemos ver que hemos avanzado, sin duda, pero que también sigue quedando mucho para cumplir con la Agenda 2030.
Si ya se partía de situaciones desesperadas en muchos de los casos (acceso a sistemas sanitarios y de educación, especies en extinción, contaminación, falta de agua…), otros obstáculos encontrados por el camino, como la pandemia o la guerra de Ucrania, no han ayudado y, de hecho, están relacionados con el retroceso de muchos de los objetivos. Este retraso en la planificación ha afectado, sobre todo, a los países menos desarrollados, los más débiles y más vulnerables a las dificultades: porque cuando el hambre o la mortalidad infantil están tan presentes es complicado, de hecho, centrarse en otras medidas para frenar, por ejemplo, el cambio climático.
Eso no quiere decir que no sigamos, entre todos, trabajando para cumplirlos, y las ideas, la innovación, son la clave. Así lo afirma el informe ODS Año 7. Innovación para lograr la Agenda 2030: nuevos modelos de negocio sostenibles publicado por el Pacto Mundial de la ONU España, en colaboración con la Fundación Canal, que indica que alrededor de la mitad de las empresas españolas ya afirma estar llevando a cabo algún tipo de innovación con un enfoque en sostenibilidad y ODS, algo que se ve especialmente entre las más grandes. Cristina Sánchez, directora ejecutiva del Pacto Mundial de la ONU España, explica que “necesitamos impulsar la innovación en los negocios y desbloquear las oportunidades que esta brinda para acelerar la carrera hacia los ODS”. Medidas que no solo las grandes organizaciones pueden implementar, como tecnología para vigilar la huella de carbono, planes sociales de inserción de minorías, acuerdos por una mayor eficiencia logística o el desarrollo de nuevos modelos de negocio y distintas maneras de relacionarse con los grupos de interés que logren, en fin, impactar positivamente en muchas personas.
En AUARA queremos ser un ejemplo de compromiso. Nuestra actividad incide indirectamente en 13 de los 17 objetivos, y de manera muy directa en el ODS 6 Agua Limpia y Saneamiento. A través de nuestro firme propósito empresarial hemos conseguido, desde nuestro origen, proporcionar acceso a agua potable a más de 92.000 personas, a través de más de 130 infraestructuras en 19 países de África, Asia y América Latina. Hoy día, gracias a la suma de muchos granitos de arena como el nuestro, se ha logrado una evolución positiva en este aspecto: de los casi 700 millones de personas con falta de acceso a agua potable en 2015, se ha reducido a 500 millones en 2020. En el área de saneamiento también se ha mejorado, pasando de los 1.500 millones a los 1.100 millones de personas sin acceso a saneamiento. Será difícil alcanzar la consecución de este objetivo para 2030, pero por nuestra parte, mediante nuestra nueva estrategia dentro del Grupo Hijos de Rivera, esperamos acelerar y duplicar nuestro impacto en los próximos dos años, y así ayudar a acercarnos lo máximo posible, junto con otras empresas sociales como nosotros.
Diferentes estudios consideran complicado que lleguemos a cumplir con la Agenda 2030 por lo que parece necesaria una replanificación y un incremento firme de los compromisos de todas las partes para poder alcanzarla. Tendremos que esforzarnos, incrementando en lo posible los compromisos de todos para acelerar en lo posible su cumplimiento.
Los estados y las empresas tienen que liderar esa ambición por cumplir con los ODS y plasmar las buenas intenciones en realidades palpables y efectivas, mientras que los ciudadanos tendremos que exigirles más ambición, además de una mayor sensibilización por los desafíos que nos marcan los 17 objetivos. Todavía nos quedan ocho años para alcanzar la Agenda 2030. Vayamos a por ello.